Bueno pues después de estar ya un poco recuperados de la carrera de ayer, ya toca comentar algo sobre como fue la maratón y un poco el viaje.
Para empezar el viaje estuvo muy bien, llevé a Mario y Paloma a visitar Cádiz junto a mi novia, ya que era allí donde nos quedaríamos a dormir, por supuesto fuimos a comer cosas típicas de la tierra, que aunque fuimos de maratón no hay que desaprovechar las oportunidades de comer bien, lo único malo es que fue corto, pero ya tendremos tiempo de hacer uno más largo.
Ya hablando de la carrera, decir que no tenia muy buen día el domingo por la mañana, antes de salir ya con dolor de estomago, que tenia todo el fin de semana, y para colmo un dolor en el gemelo que me acompaño todo el tiempo. En el km 1 ya tuve que parar para mear, y me dije pues empezamos bien, y hasta el km 10 con dolor de estomago de piernas, vamos que estuve a punto de mandarlo a la mierda todo, pero al final poco a poco cogiendo el ritmo.
Mario y yo íbamos todo el tiempo juntos, el siempre un poco delante de mi, pero intentando seguirlo para ir juntos, yo lo veía fuerte, y le decía muchas veces que tirara si quería, pero no quiso, por el camino íbamos charlando con muchos corredores, es lo bueno de una carrera tan popular, que se pueden hablar con gente de todos lados y intercambiar impresiones. Llevábamos un buen ritmo a unos 5 minutos por km, toda la carrera, el globo de las 03:30 nos paso ya en el km 33, hasta ahí muy bien todo, ya había cogido ritmo unos km atrás y había pasado el km 28 bastante bien, que para mí es el peor, y más después de que en Murcia fue donde empezó el calvario. Una vez pasado ese km ya solo pensaba en aguantar y no pensar en el dolor del gemelo.
Fue en el km 34 dentro de la plaza de España, quizás motivado por el ambiente, por los recuerdos de mis años de estudio en Sevilla, o porque el entrenamiento va dando su fruto, pero fue donde me empecé a sentir mejor y tire un poco hacía delante, Mario se quedo atrás, y yo ya intente seguir ese ritmo hasta el final, y casi lo consigo pero en los dos últimos tuve que aflojar, y más cuando en el 41 me dio un calambre en el gemelo, aunque resistí hasta el final sin parar.
Otro de los momentos que me llevaron a este subidón fue cuando vi a mi novia en la plaza del ayuntamiento, ahí me emocione cuando la vi, se me vinieron los recuerdos de nuestros años de estudiantes y fue muy bonito todo, también la cantidad de gente por esas calles animando fue bestial.
Al final una maratón para el recuerdo, en una de las mejores ciudades que conozco y con un tiempo muy bueno para mi de 03:33:24 horas, bajando en 10 minutos la de Murcia. Bueno no quiero enrollarme más os dejo unas fotos de lo que fue la carrera y el viaje.
